La defensa europea no debería ser la víctima del “gran cierre”
La defensa europea debería incluirse en los sectores críticos a medida que la UE renegocia su próximo presupuesto y recuperación.
La defensa europea debería incluirse en los sectores críticos a medida que la UE renegocia su próximo presupuesto y recuperación.
En las discusiones del Ecosistema de influencia y cultura de España en Europa, se percibe una oportunidad para España en medio de esta crisis por COVID-19.
Se presenta un análisis de la posición española en la gestión de la crisis sanitaria y económica por parte de la UE.
Los gobiernos de 13 estados miembros de la UE han firmado una carta abogando por una salida “verde” a la crisis del COVID-19.
Durante las próximas semanas se deben finalizar las negociaciones sobre el Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027. El acuerdo es importante para que la UE muestre la capacidad de dotarse con los instrumentos necesarios para mitigar los efectos sociales, económicos y financieros de la crisis del COVID-19.
La Comisión publicó en febrero de 2020 su estrategia digital: “Shaping Europe’s Digital Future”, junto a consolidar la digitalización de la UE
La COVID-19 es común a toda la UE, y requiere soluciones comunes que garanticen un adecuado control sanitario y una revitalización económica sin los errores de la última crisis financiera, totalmente distinta de la crisis actual.
El próximo ciclo 2019-2024 se presenta lleno de desafíos a nivel internacional y europeo, pero también de muchas oportunidades para España.
El tiempo dirá si las medidas tomadas por el Kremlin para la contención del COVID-19 en Rusia habrán sido eficaces.
El sistema Schengen fue el resultado de una idea progresista para permitir la libre circulación de personas, bienes y servicios y capitales en la UE.
La crisis del coronavirus es un nuevo ejemplo de que la libre circulación de personas no es compatible con una integración a medias, tanto a nivel sanitario como económico y monetario.