Transatlantic Trade and Investment Partnership (TTIP): un acuerdo ambicioso
El TTIP supondrá crear la mayor zona de libre comercio existente entre dos grandes regiones: EEUU y la UE.
El TTIP supondrá crear la mayor zona de libre comercio existente entre dos grandes regiones: EEUU y la UE.
La crisis ha obligado al gobierno y a la sociedad española a repensar su modelo de crecimiento. Una vez que la situación parece haberse estabilizado y que el ajuste avanza a buen ritmo, se pueden dibujar ciertas líneas estratégicas para el futuro.
Las elecciones alemanas no solían despertar demasiada expectación más allá de sus fronteras. Pero la crisis del euro ha cambiado la percepción que los europeos tienen de Alemania.
En 2013 se cumplen 40 años de relaciones diplomáticas entre España y la República Popular China. En el presente ARI se estudia cómo ha evolucionado y se ha transformado el modelo de relaciones empresariales España-China en este período.
Se está construyendo una unión bancaria incompleta y vacía de contenido que preserva los principales intereses alemanes, que presta insuficiente atención a las necesidades de los países del sur, que seguramente no resolverá ni el problema del crédito ni las dudas de los mercados sobre la solvencia de los bancos y que podría generar nuevas turbulencias financieras en 2014.
Las cibercélulas son una herramienta eficaz para que los países puedan operar, defenderse o atacar en un determinado ámbito cibernético y están llamadas a complementar las capacidades de ciberseguridad y ciberdefensa existentes.
La actividad financiera es demasiado importante para dejarla exclusivamente en manos de agentes económicos privados.
La crisis de la zona euro parece haberse calmado. Desde que el presidente del BCE, Mario Draghi, afirmara en el verano de 2012 que haría todo lo necesario para salvar la unión monetaria, las primas de riesgo de los países de la periferia se han ido relajando.
Aun si supera su actual bache, la UE necesitará acometer importantes reformas económicas e institucionales para poder adaptarse a la nueva realidad internacional, que se caracterizará por un mayor peso de las potencias emergentes y un entorno internacional mucho menos Occidental y cooperativo.