El acuerdo entre EEUU y Corea del Norte de febrero de 2012

El acuerdo entre EEUU y Corea del Norte de febrero de 2012

¿Por qué es importante la desnuclearización de Corea del Norte?
Porque los programas nucleares de Corea del Norte (de plutonio y de uranio) están bastante avanzados y suponen una amenaza grave, aunque hasta ahora más potencial que real. Pueden generar proliferación activa (trasvase de bombas, materiales o conocimientos nucleares a otros Estados –Irán, Siria, etc.– o incluso a grupos terroristas) y pasiva (la nuclearización militar de Japón, Corea del Sur o Taiwán).

¿En qué consiste el acuerdo de febrero?
En las terceras conversaciones bilaterales EEUU-Corea del Norte del 23-24 de febrero en Beijing, ambas partes acordaron: (1) la suspensión del programa de enriquecimiento de uranio en las instalaciones de Yongbyon y el retorno de los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), expulsados hace tres años, para verificar dicha suspensión; (2) una moratoria de pruebas nucleares y de misiles de largo alcance. A cambio, Washington se comprometió a suministrar a Corea del Norte 240.000 toneladas de ayuda alimentaria al año e hizo una declaración pública de que no tiene intenciones hostiles, esto es, que no pretende un cambio de régimen (lo que es una garantía de seguridad largamente solicitada por Pyongyang).

¿Qué aspectos no abarca el acuerdo?
No está claro si la suspensión se refiere también al programa de reprocesamiento de plutonio (desvelado en 2002), además del de enriquecimiento de uranio (desvelado en 2010). No se refiere a las probables instalaciones de enriquecimiento de uranio fuera de Yongbyon (se cree que existen varias). No incluye declaraciones o medidas de distensión con el Sur, algo importante tras la agresividad demostrada en 2010 (hundimiento de la fragata Cheonan y bombardeo de la isla de Yeongpyeong). No menciona los misiles de corto alcance, que son importantes porque pueden alcanzar prácticamente cualquier punto de Corea del Sur o Japón. No incluye referencia alguna a una reivindicación tradicional de Corea del Norte, la ayuda energética, además de la alimentaria. No se señala lo que se hará con las bombas nucleares ya existentes (estimadas entre cinco y 10). Tampoco se hace referencia a las sanciones de EEUU y del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Con todo, es cierto que esos aspectos no señalados ahora podrían tratarse cuando se reanuden las conversaciones a seis bandas o en próximos encuentros bilaterales.

¿Por qué Corea del Norte ha decidido negociar ahora?
El régimen de Pyongyang es totalmente impredecible y sus acciones son muy difíciles de entender. Sin embargo, este gesto puede suponer un cambio de rumbo de los nuevos dirigentes (Kim Jong-un y sus aliados) respecto de la política de Kim Jong-il, aunque seguramente el acuerdo actual se fraguó, al menos inicialmente, antes de la muerte de éste. También puede ser más de lo mismo por parte de Pyongyang: ganar tiempo, obtener alguna ayuda de EEUU, forzar a Corea del Sur a reanudar su asistencia, etc. Puede deberse igualmente a un motivo más simple: el 15 de abril de este año se celebrará el 100º aniversario del nacimiento de Kim Il-sung y el régimen quizá desea que, para entonces, las raciones alimentarias de la población sean mayores.

¿Es el acuerdo un importante paso adelante?
Podría serlo y acabar convirtiéndose en la sorpresa diplomática del año y en un importante éxito de la Administración Obama. Pero también puede acabar resultando en una gran decepción, dado el historial de dilaciones e incumplimientos de Corea del Norte. Los analistas más destacados se mueven entre una esperanza cauta y un abierto escepticismo.